Monday, May 21, 2007

La bella muchacha que leia Ana Karenina


Miré al asiento de la derecha, al otro lado del pasillo, trepando con los ojos desde el suelo:

Llevaba zapatos naranjas con hebilla, medias verdes -las piernas cruzadas-, falda de ante color siena y la camiseta de un lila muy claro. En sus manos, Ana Karenina, de Leon Tolstoi.

Y ya no me atreví a subir más.

2 comments:

  1. Anonymous8:41 AM

    Te perdiste sus ojos. Lo que hace la cobardía...

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  2. Soy cobarde, sí. Pero esta vez no dejé de mirar por eso.

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