Sueño que saco 12,5 sobre 10 en el examen final de Lengua Española, que consiste en pintar cualquier fragmento de asfalto de una carretera inglesa. Enhorabuena, Muñoz, esto es más que 1, más que suficiente, dice el profesor satisfecho de su ocurrencia. Miro el papel breado con desconfianza, le doy las gracias y vuelvo a la granja con mi disfraz de oso.
Nota: La ilustración es mía
¡Publicaste! =)
ReplyDelete¿Sabes? Probablemente, esto sea lo mejor de todo el día. Aparte de ti, claro.
Besogordo.
así sí compensa escribir.
ReplyDeleteGordogordo
Me encanta ese dibujo. Sales favorecido.
ReplyDeleteUn regreso sublime. El oso se parece a ti. No hay mejor forma de regresar a El Canódromo que disfrazado de oso.
ReplyDeleteJueves especial, welcome back :)
ReplyDeleteEsto me recuerda el chiste del cazador pertinaz, que tenía su oportunidad con el oso, pero fracasaba, se quedaba sin balas y entonces el oso se aprovechaba ("Ahora me toca a mí...", ¡zaca!).
ReplyDeleteY el cazador volvía otro día, y volvía a gastar su munición, y el oso. "Ya sabes. Ahora me toca a mí...", ¡zaca!
Y al final el oso le decía aquello de: "¡A ti esto te gusta...!
Pues eso, ¡que ya era hora de que volvieras, blogueroso!
Un abrazo,
Josean.
Hombre J., qué bueno volverte a ver. De todos modos, un cierto afeitado te sienta la mar de bien...
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