
En un irlandés de Pamplona. Sentados en una mesa pequeña, que les separa convenientemente, el uno frente al otro. Tratan de mantener la mirada fija en los ojos que cada cual tiene delante. No lo consiguen.
Ella: Sólo conozco a otra persona con los ojos negros… me gustan.
Él: Ehm.
Ella: ¿…?
Él: Quién… tiene, ehm, ¿quién tiene los otros ojos?
Ella: Una amiga.
Él: ...
Ella: ¿..?
Él: Ah. Eh… Bueno.
Hay veces que basta con estar... Da igual lo que se diga o lo que no.
ReplyDeleteEsto parece los Diálogos de Platón. Platón, más que Platón.
ReplyDeleteAplatonado, Peterplatón. A-P-L-A-T-O-N-A-D-O
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