Para ser ciclista hay que tener, primero, nombre de ciclista. No sé si me explico. Repasemos, por ejemplo, la clasificación general del Tour de Francia, aprovechando que hoy es jornada de descanso:
Michael Rasmussen
Alberto Contador
Cadel Evans
Levi Leipheimer
Andréas Klöden
Carlos Sastre
Haimar Zubeldía
Andrey Kashechkin
Kim Kirchen
Mikel Astarloza
Ni los nombres de los tripulantes del Apolo XI sonaban, que también, tan a mitológicos.
Falta Vinokúrov. Este creo que fue el primero en abandonar la orbita terrestre.
ReplyDeleteEl nombre más ciclístico que recuerdo es aquel de Edgar "Condorito" Corredor.
ReplyDeleteQué desastre, qué pena, qué maldita mierda. Nos ha fallado Clint Eastwood. Ayer yo estaba solo viendo el etapón. Cuando entró en meta, primero, con las rodillas cosidas, diciendo alguna palabrota en kazajo, di dos palmadas de alegría. Que se vaya al carajo.
ReplyDeleteQué desastre Vinokourov. Acabo de leerlo en Marca. Cuándo acabará la plaga...
ReplyDeletecreo que nunca.
ReplyDeleteCon los nombres la has clavado. También valdrían para novela de ciencia ficción.
ReplyDeletePues Javi, hoy habrá que seguir restando nombres en tu lista de "mitológicos"; los del Apolo XI eran menos tramposos...
ReplyDeleteAdemás de Vinokourov están fuera Kashechkin y Klöden. Y Rasmussen. Por ahora.
Lo de Rasmussen se veía venir. Lo de los otros...
ReplyDeleteQué tortazo...
esto es como la épica de antaño. llegarán 50 corredores a paris, como en los viejos tiempos.
ReplyDeleteItem más: una vez descubrí la conexión enyre poesía y ciclismo. que los autores de ambas artes son feos refeos. ¿Que no? José Ángel Valente y Fernando Escartín. Dos gigantes pequeñitos. Hermoso, poético, sacrificio.
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