
Y de repente, muy tarde, vuelves atrás y buscas entre los recuerdos en qué punto empezaste a descuidarle, dejando pasar los días hasta perder su rastro. Alguna vez, antes, la posibilidad denostada, casi -te dices- podrías haberle tocado. De pronto los años. La noticia. Y las palabras que ya sobran.
(La imagen, pescada de El País)
bueno angelito, espero que el domingo desees disfrutar de un concierto gratuido de Gatibu
ReplyDeleteluego la noticia sobrará... no me llores por la seleccion que total perderá
Las -buenas- palabras sobran pocas veces. Aunque, en ocasiones, nos empeñamos en hacerlas sobrar.
ReplyDeleteBuf...
ReplyDelete"En qué punto empezaste a descuidarle". Qué ejercicio más terrible y poco reparador.