Poeta-Arp
Leo al escultor, pintor y poeta Jean Arp:
Si me viera obligado a escoger (aunque es un imposible) entre mi obra plástica y la poesía escrita; si debiera abandonar o la escultura o los poemas, elegiría escribir poemas.
Eras clara y serena
Eras clara y serena.
Junto a ti la vida era dulce.
Cuando las nubes querían cubrir el cielo
las ahuyentabas con tu mirada.
Mirabas con serenidad y cuidado.
Contemplabas atentamente el mundo,
la tierra,
las conchas en la orilla del mar,
tus pinceles,
tus colores.
Pintabas el ramo de la luz
que crecía,
se dilataba,
se abría
sin cesar en tu claro corazón.
Pintabas la rosa de dulzura.
Pintabas la fuente de estrella.
Yo te solía ver de perfil trabajando,
frente a la ventana,
frente al mar lejano.
Trabajabas siempre con cuidado.
Yo te veía inclinar atenta la cabeza,
tu cabeza llena de las perlas del sueño.
Con cuidado hundías el pincel en el color.
Con cuidado mezclabas el color
Atentamente trazabas las líneas.
Atentamente coloreabas los planos.
Respirabas con calma.
Tus ojos relucían.
Dulcemente sin temblar abrías la puerta
hacia la luz.
Yo te solía ver de perfil trabajando,
frente a la ventana,
frente a los olivos,
frente al mar lejano.
A veces sacudías las alas y reías,
sin dejar de trabajar.
Querías darme miedo.
Hacías como que te lanzabas a volar.
Pero tu tela avanzaba
y era siempre un ramo de claridad.
Te has ido clara y serena.
Junto a ti la vida era tan dulce.
Tu última tela la dejaste acabada.
Tus pinceles bien ordenados.
Traducción: Felisa Basterrechea
2 Comments:
"A veces sacudías las alas y reías,
sin dejar de trabajar".
Precioso
Un saludo.
Regina
qué bonito poema !!
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