Por tus 30, roja
Querido Gonzalo:
Tú tenías, recuerdo bien, una bufanda roja de Benetton. La tenías, ¿verdad? Sí, yo sé que tenías una bufanda roja de Benetton con la que te paseabas muy ufano y encorvado por el largo corredor de la facultad. Tenías una bufanda roja de Benetton que llevabas incluso cuando andabas en bici -en realidad un mito, pues nunca te vi andar en bici, sino arrastrarla del manillar, pero aún así imagino-, de acá para allá, recomponiendo el regocijo interior, entre el susto y el espanto, en una mueca raruna de velocidad austera. Tenías, digo, una bufanda y la recuerdo bien, como la recordaban también aquellas universitarias histéricas y modernas que te fichaban en la cafetería, a la hora de la napolitana de chocolate. Histéricas modernas que de madrugada confesaban, en la cola del váter de algún bar, que les dabas mucho morbo, tú y tú les farfullabas algo indescifrable mientras corrías como loco huyendo como loco y marcabas el teléfono de Bea para contárselo, mamarracho.
El caso es que estoy, Gonzalo, en la tienda de Benetton con una bufanda roja en la mano y me gusta. Como la tuya me gusta, Gonzalo. Pero necesito saber, necesito saber, si cuando llueva y no lleve paraguas se mojará, como mi anterior bufanda se mojaba, Gonzalo, cuando llovía y no llevaba paraguas. Qué pasará cuando llueva, Gonzalo. Y si me sumerjo con ella en un charco, Gonzalo, ¿se mojará si me sumerjo con ella en un charco?
Pues nada.
Ya.
Eso.
Que qué hago.
14 Comments:
Cómprala. Ya.
PD: y sí que me viste andar en bici. Una vez incluso salimos los dos, y tu, intentando subir el bordillo de una acera (aprox. unos 5 cm de altura), te metiste una leche a cámara lenta y con voltereta incluida que todavía me estremece.
Vale es cierto. Pero nomeacuerdo.
Conocí a otra moderna histérica que suspiraba a tu paso... O mejor: que bufaba por la bufanda.
La bufanda hace bufar. Bufa que te bufa las histéricas modernas van detrás.
Una bufanda roja y un jersey a rayas, meacuerdo, nomeacuerdo.
Oh, Mòmo, ¿eras una de aquellas?
besote!
Anonadado me encuentro por leer "napolitana de chocolate" y no "garrote del ídem".
Jamás en mis años fcom (posteriores a los vuestros por lo que os he leído desde las sombras) fui capaz de pronunciar esa palabra: garrote.
El diálogo era algo así:
- Buenos días.
- Buenos días. Café con leche, en vaso, muy caliente y... una... napolitanadechocolate.
- ¿Un garrote?
- Sí. Eso. (en voz baja) Napolitana.
Y ahora que vivo en Milán, se llaman de otra manera.
Jajaja. En realidad, decíamos garrote. Sí. Pero utilizo napolitana para que entiendan los que no son de Pamplona.
Dewey, en Milán, con eso de la rivalidad norte-sur, jamás llamarían napolitana a un garrote. Te darían un garrotazo. Las bicicletas son para el verano y las bufandas para el invierno, pero no se mezclan.
¿Cómo es Napolitana en Georgia?
Aquí les llaman Chocolate Croissant...
Una napolitana en Nápoles es otra cosa. Sabrosa también, con perdón.
No, J., no era de aquellas, aunque recuerdo haberme reído hasta la lágrima con G. en un ensayo de teatro.
Creo que Gonzalo, con elegancia, noseacordará.
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