Dejate caer
Sábado.
Marta, Pablo y yo.
Imposible manejarse por las arterias del casco viejo: glóbulos blancos, glóbulos rojos. Bares y peñas, atestados. El suelo, un campo de batalla sin fragor y muchas derrotas: cuerpos acurrucados, piezas de tetris.
Llegamos a las carpas de Labrit, que tienen eso del aire. Decidimos acercarnos a la barra, quince metros eternos. El bullicio de la imagen podría dar a entender que la bebida es gratis. Hay que subir algunos peldaños a los que cuesta acceder, las chicas los aprovechan para contonearse: quieren que las miren. Miro. Y una de ellas me mira:
- ¿sabes quién soy?
- Ni idea
- ¿No me conoces?
Empiezo a manejar la baraja mental de caras con nombre. No consta.
- ... no...
- Yo tampoco a ti, cómo te llamas...
- Javi...
Besos.
- Beatriz...
Qué espesura llevo.
- Me empujan...
Enarco la ceja:
- Déjate caer.
- ¿Qué?
Le doy un suave empellón. Queda a mi altura.
- Se acabó el peligro, ¿ves? Ha sido fácil. Cuídate, Beatriz.
La imagen es de Guillermo Navarro.
2 Comments:
Buen samaritano. O tipo listo.
Las fotos de Guillermo muy bien.
Hola, soy Guillermo Navarro.
Tomad mis fotos, manipuladlas,quemadlas, usadlas.
Os lo agradeceré, alguien habrá hecho algo con mis fotos, al fin, salen de mi cajón y de la papelera de los funcionarios-comisarios que como dioses eligen para mis fotos su total silencio. Allí desesperan y gritan en un lenguaje que ellos no pueden entender.
Gracias.
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